De buenas con La Mala // Al ritmo de Mala Rodríguez
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editorial Revista Apolorama
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miércoles, diciembre 16, 2009
Por Katy Cano
De buenas con La Mala // Al ritmo de Mala Rodríguez
María Rodríguez, Mala María, Mala Rodríguez, no importa como se la denomine, de cualquier forma pareciera que el sólo hecho de mencionarla ya es un estribillo desbordante de sinfonía “Mala Rodríguez es como una ráfaga de aire puro”.Debe ser una de las principales, por no decir la única, exponente en nuestro idioma que ha logrado a punta de rima y verso ubicarse en un privilegiado sitial en este mundo predominado por hombres de ritmo rudo como lo es el género del hip hop.
“Donde me crié pude ver gente bailando desde pequeña, también gente que rimaba y hablaba del barrio, sus calles, su gente. Años después empecé a escuchar hip hop, rimaba en la calle con otros raperos de distintas partes de Sevilla, también me interesaba el graffiti”, cuenta la cantante nacida en Cádiz, al ser consultada por sus inicios en el género.
María Rodríguez es el resultado del tiempo en la casa de su infancia, donde primaban a buen volumen Lole y Manuel, Pink Floyd, Madonna, Chick Corea y Rocío Jurado. Afirma que desde que tenía nueve años empezó a tomarle cariño al canto y a escribir, lo que se tradujo en incontables “conciertos” en la azotea junto a sus amigos del vecindario. Así la española de ojos claros empezó su formación en la música y en la vida, aclamando a Charlie Chaplin, Albert Einstein, Nikola Tesla y a personas que con su sonrisa hacen que la vida sea más bonita, como todas las madres que luchando sacan adelante a sus familias. Héroes justos y necesarios para hacerse una idea del mundo que quería y quiere.
En un vaivén de preguntas “La Mala” se presenta para los que aún no la conocen y para los que ya saben de ella, sonríe. De buen gesto nos ayuda a torear la diferencia de horario entre Lima y Barcelona, somos el primer medio peruano que conversa con ella, de nuestro país tiene buenas referencias, de nuestra América mil emociones a flor de piel.
“He tenido muchos referentes musicales de la América Latina desde pequeña, como Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa o Carlos Puebla que además son de la década de los 70 y 80, que considero la mejor de todas ¿Cómo no amarlo?. Respecto a Perú sé que allí se encontraba una de las civilizaciones más antiguas del mundo, es la cuna de los Incas, la tierra del cóndor, rica en recursos naturales, me gustaría visitar algún día el Machu Picchu, dicen que es hermoso”, confiesa.
Con siete producciones a cuesta, miles de discos vendidos y premios, María Rodríguez Garrido, acaba de asumir el reto de realizar una gira por el interior de España, acompañada de “La Original Jazz Orquestra de Barcelona” que ha sabido adoptar el repertorio urbano, hecho que le ha significado un verdadero regalo. El camino ha sido productivo para la muchacha de Jerez de La Frontera, ha logrado una significativa incursión en la actuación dentro de largometrajes españoles, cedió canciones para videojuegos como Scarface The World is Yours, además de haber formado parte de algunas bandas sonoras de las que se destaca “Yo marco el minuto” uno de los temas incluidas en la película “Lucia y el sexo”.
“Me siento agradecida por este tremendo privilegio, poder compartir el arte que uno hace con los demás es algo hermoso, realmente uno recoge lo que siembra. He recogido mucho amor y muchas experiencias valiosísimas que me han hecho crecer”, asegura, mientras hace remembranza de estos años de trayectoria.
Pero así como surgieron los reconocimientos, en los últimos años Rodríguez ha sido punto de críticas de parte de aquellos que aseguran que la cantante se ha desligado de sus raíces y ahora ostenta un halo netamente comercial.
“Pienso que nadie puede juzgarme, tengo un gran compromiso con aquello en lo que creo y mi trabajo lo demuestra. Con los años he enriquecido mi estilo, he buscado sin parar. Me deprimiría mucho si siguiera haciendo lo mismo que en el 97. Lo que pasa es que hablar es gratis y muchos no tienen consciencia de lo que hablan”, responde.
Aficionada a la danza, el cine y el futbol, La Mala se proyecta para el año que viene, ha escrito algunos temas que espera formen parte del disco que viene, no ahonda en detalles, no dice más, no puede, no quiere, pero confiesa que le desborda la idea de verse nuevamente en un estudio de grabación, pareciera que en cada trabajo aún conserva esa sensación del comienzo de su carrera “La primera vez soné en la radio, yo estaba en mi cuarto y tenía la radio encendida, estaba sonando, llamé a mi madre corriendo, yo no podía creerlo, fue alucinante”, acota, mientras disfruta de las horas en su cabaña en medio del bosque, en un cuarto lleno de libros y aparatos de música como ella misma describe, asumimos que nuestro tiempo ha concluido, atrás dejamos las madrugadas y días compartidos con sus relacionistas de medios, mails, fotos, más mails, recursos que nos ayudaron a descubrir que María que de “mala” no tiene ni un pelo.
“La Buena, La Bonita y La Mala”
Para muchos Mala Rodríguez suena familiar en Latinoamérica por trabajos con Calle 13, Tego Calderón, Julieta Venegas y para el primer disco en español de Nelly Furtado, donde además vuelve a compartir micrófonos con la intérprete de “Lento”, participación que la prensa calificó como “Fiesta de chicas: La Buena, La Bonita y La Mala”.
“A Nelly le apetecía mucho hacer un tema rodeada de mujeres, estaba enamorada de esta canción que compuso Julieta hace tiempo y le pareció la ocasión perfecta para conocernos, ella es super agradable y muy simpática, le deseo que le vaya muy bien con su nuevo trabajo. Julieta y yo nos conocíamos hace tiempo, me encanta hacer cosas con ella, Realmente lo hemos pasado muy bien compartiendo, Cada una en su forma aporta algo distinto al tema” refiere sobre su colaboración en el tema “Bajo otra luz”.
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